Partiendo del modelo de la iglesia de Jesús en Roma, edificio emblemático de arte jesuita que sirvió de modelo para muchas iglesias jesuitas, la Capilla de los jesuitas de Saint-Omer fue construida entre 1615 y 1640.

Después de muchas obras de restauración, la última de las cuales data de finales del siglo XIX, la Agencia de Urbanismo y Desarrollo de la Región de Saint-Omer realizó, como parte del estudio para la renovación de el edificio, un programa de eventos. El recinto renovado debe poder organizar conciertos, exposiciones, mercados interiores, seminarios y cenas de gala. Se prevén varios escenarios arquitectónicos, escenográficos y acústicos.

Desde el punto de vista acústico, la Capilla Jesuita es un espacio sonoro muy reverberante, debido a su gran volumen y la baja absorción acústica de sus superficies. Un gran tiempo de reverberación no es generalmente favorable para la inteligibilidad de los mensajes sonoros en el contexto del programa previsto. Se han estudiado soluciones para reducir la reverberación de la sala respetando la calidad patrimonial del edificio.